Nacido en Palma de Mallorca en 1949, Ferran García Sevilla se trasladó a Barcelona en 1969, ciudad donde se licenció en Historia Moderna y Contemporánea (1972) y en Historia del Arte (1974). Entre 1975 y 1981 dio clases de arte contemporáneo en la Facultad de Historia, y desde 1981 hasta 1985 enseñó pintura en la Facultad de Bellas Artes. Escribió una tesis doctoral sobre el arte conceptual, y en los años setenta, al comienzo de su carrera, fue uno de los más destacados miembros del arte conceptual catalán. A partir de 1978 se centró en la pintura, aunque desde planteamientos analíticos o conceptuales, y mostró sus primeros trabajos en Francia invitado por Marcelin Pleynet. En aquellos años se interesó por el maoísmo, el estructuralismo y el pensamiento de Ludwig Wittgenstein. En 1982 visitó los Estados Unidos por primera vez, y también viajó al Sahara. Interesado por las filosofías y las manifestaciones artísticas orientales, después viajó a Egipto, la India, Tailandia, el Tíbet e Irán, entre otros lugares. En 1985 vivió temporalmente en París. En 1985, García Sevilla expuso en el Riverside Studios de Londres, y al año siguiente representó a España en la Bienal de Venecia. En 1987 se celebró su primera retrospectiva en el Musée des Beaux Arts de Nimes, y fue seleccionado para la 8º edición de la Documenta. En 1989 se le dedicaron distintas muestras institucionales en Barcelona, Madrid y Tokio. En 1996 representó a España en la Bienal de São Paulo. En 1998 expuso en el Instituto Valenciano de Arte Moderno. Su última retrospectiva hasta la fecha fue organizada por el Irish Museum of Modern Art de Dublín en el 2010, que después viajó al Museo Patio Herreriano de Valladolid. García Sevilla está considerado como uno de los artistas clave del arte conceptual catalán y uno de los grandes representantes del retorno internacional a la pintura en los años ochenta. En los últimos años ha generado imágenes con la ayuda de ordenadores.