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Marruecos está presente II

Título original: El Marroc hi és present II

Joan Hernández Pijuan

1993

Óleo y esmalte sobre tela

Medidas: 125,5 x 200 cm

Referencia: ACF0248

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Las obras realizadas por Pijuan a mediados de los años setenta, es decir, casi dos decenios antes de haber producido estas dos, se caracterizaban por el ritmo estable de la pincelada, que modula rugosidades sobre la superficie de la tela a la vez que armoniza la luz, y por una progresiva degradación del color monocromo, lo que provoca la sensación de que la pintura está viva y en movimiento. En pinturas de los años noventa, como El Marroc hi és present II y Solcs amb llum d’argent, aparece un trazo de ritmo estable que organiza una trama geométrica, más o menos rígida o flexible. A la pintura al óleo, como ya ocurría en algunas telas de la década precedente, se añade ahora el esmalte industrial o sintético, que proporciona carnadura a la superficie y permite al artista lograr tanto la incisión del dibujo en la pasta misma como su presencia lineal y puramente cromática. En muchas de estas obras –desde luego, así ocurre en estas dos– la luz brilla en la tela mediante procedimientos exclusivos de la pintura, sin referente naturalista de ningún tipo, sino como fruto de las nervaduras hechas por el pincel y del contraste que la malla provoca. También, lógicamente, por el juego de colores y la aparición de los tonos subyacentes a la última capa visible. El tema de la celosía –evidente en El Marroc hi és present II, con su alusión al país magrebí– nos remite a una dialéctica que ha sido vertebral en el entendimiento estético de Joan Hernández Pijuan: la que mantienen espacio abierto (el paisaje contemplado desde fuera) y espacio íntimo (visto desde el corte que imponen las ventanas del taller-estudio). Entre esos dos horizontes ha transcurrido la vida de este artista.

Mariano Navarro