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Conversation Piece (Hirshhorn)
1995
Resina y arena
Medidas: 170,5 x 191 x 124 cm
Referencia: ACF0037
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Tres personajes están discutiendo con vehemencia. Dos de ellos parecen acorralar a un tercero. Uno, casi encima, le mira muy de cerca, y el otro le sujeta por el pecho, mientras que con su mano derecha hace un gesto obsceno. Las figuras, de tamaño natural, son un insólito híbrido de persona y saco, unos tentetiesos cuyas pesadas bases esféricas -un pedestal integrado en la figura, inseparable de su propio cuerpo- problematizan las convenciones de estabilidad, desequilibrio y motricidad.
Nada conmemora este grupo escultórico de lograda atemporalidad; nada señala, más que la permanente interacción humana. La escena, pura cotidianeidad congelada, carece de otra referencia que no sea su pertenencia al presente, al mismo continuo vital del espectador, quien -extraordinaria inversión-, convertido en invitado de piedra, asiste a una situación que, aunque transcurre ajena e indiferente a su mirada, demanda su atención y pide ser traducida, interpretada.
Las Piezas de conversación, que el artista comienza a desarrollar en 1991, representan un paso decisivo en su indagación sobre las relaciones entre escultura y espacio, y marcan la evolución desde la contenida dramaturgia de sus habitaciones-escenario hasta la experiencia -de carácter marcadamente más narrativo, aun cuando el contenido de la narración siga siendo opaco- de su ubicación en espacios exteriores, como en las obras realizadas para la Documenta IX, para The Irish Museum of Modern Art de Dublín o en grandes entornos arquitectónicos, como su Plaza, presentada en el Palacio de Velázquez de Madrid en 1996.
La centralidad de la figura humana en el universo de Juan Muñoz alcanza su apogeo en estas series. Su decidida recuperación de la misma es, de hecho, una de las aportaciones esenciales del artista a la escultura contemporánea: la figura, no al servicio del realismo, ni deudora de las imágenes canónicas de los medios de comunicación, sino enfrentada, como un espejo, a la polimorfa crisis del cuerpo y del sujeto de finales del siglo xx.
Este grupo de personajes es el germen de otra obra, realizada en bronce a partir de sus moldes y con varias figuras más, instalada en el Sculpture Garden del Hirshhorn Museum de Washington.
