Paul Graham
Reino Unido, 1956
Volver
Paul Graham (Stafford, Reino Unido, 1956) inició su práctica en fotografía como autodidacta y leyendo libros sobre esta disciplina. Sus referentes fueron los grandes pioneros americanos: Robert Frank, Walker Evans y Paul Strand, así como William Eggleston en el uso del color. Graham fue uno de los primeros artistas en Gran Bretaña en hacer uso del color en fotografía documental, junto con Martin Parr. Este hecho, en un primer momento, fue percibido por la crítica y por el entorno fotográfico como inapropiado, por no seguir el canon establecido por la tradición documental y de agencias como Magnum.
Las series fotográficas de Graham a menudo se estructuran alrededor de un viaje. Uno de sus primeros trabajos A1 - The Great North Road (1983) está conformado por imágenes –cafeterías de carretera, filas de camiones, etc.– tomadas alrededor de la A1, la autovía que recorre el Reino Unido desde Londres hasta Glasgow uniendo las regiones industriales del norte con las de servicios del sur y que sería el escenario de las manifestaciones de mineros que ya se empezaban a gestar en protesta por las medidas del gobierno de Margaret Thatcher. Beyond Caring (1985), por otro lado, está conformada por imágenes tomadas en las oficinas de la seguridad social en un período de crecimiento del paro. En estas primeras series Graham deja patente su interés por los temas de carácter social así como por los rastros que la historia deja en los lugares. Muestra cómo la historia se revela en los detalles del paisaje y en las minucias de lo cotidiano.
Graham realizó Hypermetropia a principios de 1995, mientras estaba trabajando en Japón en un proyecto de cinco años titulado Empty Heaven. Las fotografías que integran Hypermetropia se realizaron en Tokio en un solo día y documentan un trayecto. La primera fotografía está tomada desde la parte superior del bloque de apartamentos donde Graham residía y a partir de allí va tomando una foto desde lo alto del próximo edificio situado a una distancia media. A medida que se avanza en la serie fotográfica la ciudad retrocede, la cámara nunca captura la extensión en su totalidad y el cielo va cambiando su aspecto a medida que el día avanza. Ninguna imagen ofrece la gran panorámica de la ciudad que uno se espera. La visión que ofrece Hypermetropia de Tokio es una imagen fragmentada y caótica.
Neus Miró