Susy Gómez
España, 1964
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Susy Gómez estudió Bellas Artes en la Universidad de Barcelona. Durante un período de tres años, la artista compaginó los estudios universitarios con el aprendizaje de diseño de moda en la Escola d’Arts i Tècniques de Catalunya. La trayectoria profesional de Susy Gómez se inició en el año 1993, cuando presentó su primera exposición individual en el Espai 13 de la Fundación Joan Miró de Barcelona. Con el nombre de «Sense títol», esa exposición comenzó a poner de manifiesto que aquello que pretende la artista es abrir su obra a todo tipo de interpretación, siempre que en ella participe el espectador a través de una percepción reflexiva y serena. La obra de Gómez se caracteriza desde el principio por el uso y la variedad de lenguajes, que la artista escoge en función del potencial expresivo que estos tienen. Esta opción la lleva no solo a trabajar con cualquier tipo de material, sino también a evocar la complejidad sobre la que se fundamentan los sentimientos más privados del individuo. En 1994, Susy Gómez presentó en la galería Luis Adelantado de Valencia su segunda exposición individual. A pesar de que tenía el mismo título que la primera, aquella muestra significó un paso muy importante en el camino hacia la utilización de otros lenguajes expresivos: en ella empleó por primera vez las fotografías de gran formato que descansan en el suelo (alteradas o transformadas por su intervención mediante la aplicación de pintura o la utilización de técnicas informáticas); las mesas constituidas por pequeñas esculturas, objetos o formas realizados a partir de su uso como muelle; los transferibles, o dibujos directos aplicados sobre la pared, etc. Esta diversidad de obras y lenguajes hace que sea necesario empezar a considerar su producción en función no solo del interés individual de cada obra, sino también de los discursos que la artista va manifestando en cada una de sus intervenciones. Embarcada en desvelar diferentes aspectos de su identidad y en cuestionar al espectador sobre la inconstancia de su subjetividad, la obra de Susy Gómez adquirió un nuevo impulso en 1995 a partir de la exposición «(mi:)», presentada en la galería Giorgio Persano de Turín. En ella proponía una serie de sensaciones que nos invitaban a explorar los deseos como estímulos vitales, y lo hacía a partir de materiales tan diversos como el cristal, el cabello sintético, el yeso, el hierro, la tinta, la madera, la tela, las flores naturales y la presencia casi imprescindible de fotografías de gran formato. Desde entonces hasta la actualidad, la artista ha realizado numerosas exposiciones presentando su obra como una especie de striptease mental, que consiste en dejar caer ante los ojos de los espectadores diversos aspectos de su pensamiento tras unas obras conscientemente seductoras.
Frederic Montornès